El Aloe Vera es una planta que es conocida por sus propiedades medicinales y curativas. Es una planta suculenta usada ampliamente en la medicina para el tratamiento de enfermedades y lesiones, y también se emplea con finescosméticos. La buena noticia es que es una planta muy fácil de cuidar y no requiere de muchos cuidados para mantenerla en perfecto estado. Si deseas tener tu propia planta de Aloe Vera te diremos a continuación cómo se debe cuidar.
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Seleccionar un buen lugar para el Aloe Vera
El principal cuidado que debemos tener con la planta de Aloe Vera es la ubicación adecuada. El lugar ideal para la planta debe estar bien iluminado y estar alejado de la luz solar directa, las corrientes de aire directas, los radiadores y las estufas. El exceso de sol puede conllevar a que la planta se seque completamente debido a que esta planta necesita una buena iluminación pero que no sea excesiva.
Mantener el suelo húmedo
Esta planta necesita una humedad moderada por lo que es recomendable regarla dos veces por semana, asegurándonos de que el agua no empape completamente el suelo o encharque la maceta. Si observamos que el suelo está muy seco es recomendable regarla un poquito más de lo acostumbrado.
Aplicar fertilizante
Cada tres meses le podemos aplicar un fertilizante suave, con el propósito de que la planta pueda mantenerse saludable y vigoros a lo largo del tiempo.
Atender a las plagas
Las plagas que atacan a la planta de Aloe Vera son muy comunes y como la planta es muy vulnerable a ellas resulta necesario darle un control preventivo. Los insectos que más suelen atacarla son los áfidos, cochinillas y trips, los cuales se pueden eliminar con insecticidas aptos para uso en plantas para su cultivo en interiores.
Tener paciencia
Finalmente, ten en cuenta que el cuidado de una planta de Aloe Vera es algo que requiere de paciencia, así que al momento de planarla es recomendable no esperar obtener resultados al primero de inmediatos. Recuerda que si aplicas los cuidados básicos, tu planta puede llegar a durar más de cinco años.
En conclusión, el cuidado de una planta de Aloe Vera no es algo complicado. Es una planta fácil de cosechar y mantener en perfecto estado si se aplica cuidados básicos como elegir un buen lugar para la planta, regarla con agua moderada, aplicar fertilizante de vez en cuando y mantener el control de plagas.
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