El Aloe, también conocido como Sábila, es una planta suculenta ampliamente utilizada por los amantes de las plantas para producir un gel medicinal, el cual es reconocido por sus enormes beneficios para la salud. El Aloe es tan fácil de cultivar que se ha convertido en una excelente opción para los jardines de interior de casi todos los adictos a las plantas. Los beneficios de tener Aloe Vera creciendo en el hogar incluyen la facilidad para cortar un pedazo y extraer el gel medicinal, y su cuidado es sumamente sencillo. Siguiendo los siguientes pasos, tendrás tu propio Aloe creciendo dentro de tu hogar en nada de tiempo.
Table of Contents
Paso 1: Preparar la maceta
Lo primero que debemos hacer para tener Aloe en nuestro hogar es comprar nuestra maceta. Para obtener buenos resultados, es recomendable obtener la mayor maceta posible para darle espacio a nuestra planta para poder crecer. De igual manera, asegúrate de obtener una maceta con un drenaje apropiado para alcanzar su estabilidad.
Paso 2: Selecciona una planta adecuada
En la segunda parte, debemos comprar la mejor opción de Sábila que podamos encontrar. Está recomendado encontrar una plántula de tan solo algunas semanas de vida. De esta manera se asegura que la planta no tenga insectos, enfermedades u otros factores que pudieran afectar su crecimiento.
Paso 3: Coloca la planta en la maceta
Una vez que hayas encontrado el mejor recipiente para tu Aloe y hayas adquirido la mejor planta de la ciudad, llega el momento de concretar el proyecto. Para esto, sólo debes llenar la maceta con una buena mezcla de tierra y abono para plantas; también hay que mantener un nivel alto de humedad. Luego, debemos poner la planta en el recipiente y aplastar levemente la tierra.
Paso 4: Difunde agua para la planta
Posteriormente, debemos asegurarnos de darle suficiente agua a la planta para que su crecimiento sea efectivo. Sin embargo, es muy importante no sobrecargarla, ya que –como todas las plantas- afectaría el crecimiento y el desarrollo de la misma. La mejor manera de mantenerla fresca es empezar con una cantidad pequeña de agua y revisar constantemente los niveles.
Paso 5: Exposición a la luz solar
A diferencia de otras plantas, el Aloe es una especie que requiere de un nivel más bajo de luz solar para su correcto desarrollo. Esto significa que debe recibir la suficiente luz del sol para poder realizar su proceso fotosintético, pero no debes exponerla al sol durante todo el día porque esto la dañaría e impediría que crezca.
Siguiendo estos sencillos pasos, podemos tener nuestro propio Aloe creciendo sin problemas en el interior de nuestro hogar. El cuidado de este tipo de plantas es sumamente sencillo con la desventaja de no poder cosechar demasiado su fruto, aunque si es más que suficiente para poder disfrutar de sus magníficos beneficios medicinales. Esta es una excelente opción para los principiantes en el tema de las plantas, y su satisfacción es garantizada.
Conclusión:
El Aloe Vera es una de las mejores opciones para aquellos amantes de las plantas que deseen comenzar a incursionar en la jardinería. El cuidado de la planta es muy sencillo, además de tener enormes beneficios para la salud al tener la facilidad de cosechar su fruto en caso de que necesitemos su gel medicinal. Además de esto, su crecimiento es comúnmente asegurado.
Productos Relacionados:
- None Found